LO QUE UN CONDUCTISTA LE RECONOCE A
FREUD (Ruiz, 2018)
Es muy habitual contraponer conductismo y psicoanálisis. Los
argumentos mutuos más usados suelen ser los siguientes:
-Desde el lado psicoanalítico:
.Los conductistas
niegan la subjetividad y no les
interesa lo que pasa en el interior, ya que solo les importa lo que es visible
públicamente, o sea la conducta.
.Los conductistas no
tienen en cuenta los procesos
inconscientes, sino solo las influencias del medio ambiente.
.La terapia conductista
se basa en premios y castigos
arbitrarios por parte del terapeuta a las acciones de sus clientes, que
dirige la terapia de modo autoritario y
mecánico.
-Desde el lado conductista:
.El psicoanálisis es
una pseudociencia al no apoyar sus
aseveraciones en hechos contrastados científicamente.
.El aparato mental que
postula (yo-ello-superyo) es un constructo
inferido sin base alguna y menor utilidad.
.Sus éxitos terapéuticos
no van más allá del puro azar o placebo.
Sin duda hay muchos más argumentos de ambas partes para
aminorar a los que consideran sus “adversarios”. Basta con ver bibliografia
pasada y más actual de ambas perspectivas.
¿Y las cosas funcionan así en todo momento y circunstancia? Afortunadamente
no. Es más cuando hay un conocimiento real, que no una imagen prejuiciosa, de lo
que hacen unos y otros, una mayor comprensión mutua se abre camino, de manera
minoritaria y perezosa, pero existe esa senda.
Por lo pronto desde mi lado conductista reconozco como muy
relevante a Freud y el psicoanálisis lo siguiente (que no es una lista acotada
y definitiva, sino más bien ampliable):
1-Las relaciones entre el terapeuta y sus clientes generan
ocasiones donde los problemas de los clientes (y de los terapeutas) se reproducen,
siendo oportunidades para usar lo que ocurre allí para el cambio. A esto desde
lo psicoanalítico se le llama “transferencia
y contratransferencia” y desde lo conductista “relaciones de equivalencia y conductas clínicamente relevantes”.
2-Gran parte de la relación entre el/la cliente y el/la terapeuta ocurre bajo el
control de “variables no percatadas o
inconscientes” que derivan de la misma relación y de las experiencias
biográficas de sus componentes. Esto ocurre también en la vida cotidiana de las
personas, no solo en la terapia.
3-El aparato psíquico freudiano si bien es una metáfora,
puede ser útil en varios niveles explicativos al reflejar instancias de control de la conducta humana como los estados de
privación de necesidades básicas, la presión sociocultural de diversas
instancias de poder con sus reglas y los intentos del sujeto para adaptarse a
circunstancias conflictivas y muchas veces contradictorias.
4-Diversas modalidades de psicoterapia
basadas psicoanalíticamente han mostrado evidencias en diferentes problemas
humanos. Cada perspectiva argumentará por qué esto es así, pero es un
hecho.
5-Existen reconocimientos
mutuos de aportaciones de la otra perspectiva. Un caso paradigmático es la
psicoterapia analítica funcional, de base conductista, que hace observable y operativo los conceptos de transferencia y
contratransferencia en una terapia conductista.
6-Ambos modelos defienden la importancia de lo biográfico y son anti-reduccionistas a mecanismos puramente neuro-cerebrales al
explicar el comportamiento humano. Lo que no quita, obviamente sus diferencias.
7-El darwinismo
evolutivo que ambos modelos comparten.
Alguna Bibliografía relevante del asunto:
-Kohlenberg, R. J., y Tsai, M. (1991 original). Psicoterapia analítica funcional. Universidad de Málaga (traducción de 2007)
-Pérez Álvarez, M. Entrevista a Marino Pérez Álvarez. El
conductista radical (dos partes). (2013) TEMAS DE PSICOANÁLISIS Núm. 5.
-Ruiz
Sánchez, J.J. Transferencia y contratransferencia. Del psicoanálisis a la
psicoterapia analítica funcional. (2013) Realitas:
revista de Ciencias Sociales, Humanas y Artes, Vol. 1, Nº. 2, págs. 52-58
-Watchel, P. Entrevista a Paul L. Watchel. Clínica e Investigación Relacional.
Revista Electrónica de Psicoterapia. (2008).Vol. 2(2). Pp.433-441.
No hay comentarios:
Publicar un comentario