Un análisis del envidiar desde una perspectiva que combina el análisis funcional del conductismo con diferentes saberes que van desde la religión, la filosofía, la antropología, la sociología, las ciencias políticas, la historia del arte y la psicología. Tal exposición de perspectivas busca ampliar el conocimiento multidisciplinario de tal clase de conducta que tanta importancia tiene en la convivencia humana y sus problemas.
Volumen de 412 páginas.
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INDICE
Introducción: ¿Por qué el término “envidiar” y no “envidia”. Página 7.
Capítulo 1. Religión del envidiar. Página 10.
Capítulo 2. Filosofía del envidiar. Algunas perspectivas. Página 59.
Capítulo 3. Historia, antropología y sociopolítica del
envidiar. Página 137.
Capítulo 4.Historia iconográfica del envidiar. Página 217.
Capítulo 5. Papel y función del envidiar en la vida de 4
personajes famosos. Página 319.
Capítulo 6. Psicologías del envidiar: Psicodinámica, Cognitiva,
Neurocientífica, Psicosocial, Evolutiva, Factorial y Conductual. Página 333.
Introducción: ¿Por qué
el término “envidiar” y no “envidia”?
La vida de cualquier ser humano se caracteriza por una
continua actividad en relación al mundo en el que vive y se relaciona con las
personas, las cosas y su sí mismo.
La psicología y otros
conocimientos de manera tradicional para explicar la actividad de las personas
se ha nutrido frecuentemente de la psicología popular que hace uso frecuente de
capacidades, rasgos o facultades internas para explicar por qué la gente hace
lo que hace. Conforma una especie de “psicología del nombre”. Así se habla del
amor, de la ira, del odio, de la memoria, la envidia etc., como entidades que explican el comportamiento
humano.
La perspectiva dominante de este libro es sin embargo el
conductismo, que entiende desde su perspectiva que la conducta de las personas,
aún su actividad o conducta llamada interna o mental está siempre en relación
con sus circunstancias de la vida, de que nos pasa en ella y de las
consecuencias de nuestras acciones. Así
habla de amar, de odiar, de recordar, envidiar, etc., como actividades de
relación y por lo tanto es una “psicología del verbo”.
Las psicologías y otros conocimientos del nombre no son sin
embargo desdeñables, ya que acumulan importante conocimiento, aunque muchas
veces oculten las circunstancias vitales donde transcurren tales eventos o los
presenten como constructos mentalistas.
Por ello en esta obra lo tenemos en cuenta, y atendemos a “la envidia” también.
Sin embargo preferimos los conocimientos que ponen a las
personas en relación a sus semejantes a través de lo que se hacen y se dicen
unos a otros en determinadas circunstancias de la vida y que efectos o
consecuencias tiene todo esto no solo a nivel de relaciones específicas sino
también culturales, de modo que se puedan “empoderar” a las personas para hacer
cambios en tales momentos de sus vidas.
De ahí que el título de la obra conlleve el verbo “envidiar”, junto a su problemática y
resolución.
CADA CAPÍTULO LLEVA UN ANÁLISIS FUNCIONAL APLICADO A ESA PERSPECTIVA ****
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