domingo, 30 de marzo de 2014

ACT: METAFORA DEL DIQUE CON AGUJEROS

Metáfora el dique con agujeros: Evitación, control y estar dispuesto (aceptación)

   Veamos, imaginarios un dique que tiene agujeros por los que antes o después sale  agua y suponga que aquí está una persona para quien ver correr el agua a través de  esos agujeros le produce una sensación de descontrol y desasosiego  extremo que no puedo soportar.

   Pero no hay problema, porque esta persona parece que ha encontrado un modo de evitar su desasosiego y su necesidad de controlar  que el agua fluya. Verá (aquí el terapeuta representará los movimientos que describe esa persona para controlar eso).


   Esta persona está pendiente de ver si fluye el agua por los orificios. Tan pronto ve que el agua fluye por uno, rápidamente se tranquiliza porque lo resuelve poniendo el dedo índice en el pequeño agujero. Más tarde, tampoco tiene problemas, ya que cuando el agua fluye por otro orificio, sitúa el otro dedo índice. Más tarde, ve que fluye agua por otro, pero tampoco hay problemas, coloca un dedo del pie derecho.


   Más tarde, coloca el dedo del pie izquierdo en otro orificio. Vuelve la tranquilidad y la sensación de control. Aún sigue sin problemas, ya que cuando surge agua por otro agujero sitúa su nariz en el orificio y vuelve a tranquilizarse. Y así sucesivamente. Parece que está controlando, eh, ¿qué le parece? Fíjese cómo está...Sin embargo, este hombre no encuentra la tranquilidad, ya que sí parece que pueda controlar el agua, pero ¿a qué precio? Se lamenta de no poder llevar su vida, tiene que estar controlando que el agua no salga. Finalmente, no es feliz en esa posición.


   . ¿Qué le sugiere?, ¿qué es lo que, como el agua, no puede soportar usted? Y ¿cuál es el precio que tiene que pagar por no ver fluir el agua?

   
  .  ¿Y si además tuviera que moverse en una dirección que le importa e interese, lejos del dique? (dirección de sus valores personales)

ACT: MINDFULNESS. ATENCION PLENA A LA RESPIRACION



Atención plena de la respiración (breve)
 Te invito a que te sientes con tus pies apoyados en el suelo y tu espalda derecha, y que cierres tus ojos o los fijes en un punto. Trae tu atención a tu respiración y obsérvala como si fueras un científico curioso que nunca ha visto la respiración antes… nota el aire mientras entra a través de tus fosas nasales…y baja hasta el fondo de tus pulmones… y nótala mientras fluye hacia afuera nuevamente… nota el aire moviéndose dentro y fuera por tus fosas nasales… cómo es ligeramente más cálido cuando sale… y ligeramente más frío cuando entra… nota la sutil elevación y descenso de tus hombros… y la gentil elevación y descenso de tu tórax… y la calmada elevación y descenso de tu abdomen… fija tu atención en una de estas áreas, dondequiera que prefieras: en el aire entrando y saliendo por las fosas nasales, en la elevación y descenso de tu tórax, o en el abdomen...

Mantén tu atención en este punto, notando el movimiento –entrando y saliendo- de la respiración (pausa 20’’) Sean cuales sean los sentimientos, impulsos o sensaciones que surjan, ya sean placenteros o displacenteros, gentilmente reconócelos, como si saludaras con un movimiento de cabeza a personas que están pasando por tu calle… gentilmente reconoce su presencia y déjalos estar… permitidles ir y venir a su antojo, y mantén tu atención en la respiración (pausa 20’’) Sean cuales sean los pensamientos, imágenes o recuerdos que surjan, confortables o incómodos, sólo reconócelos y permitidles estar… déjalos ir y venir a su antojo, y mantén tu atención en la respiración (pausa 20”) De tanto en tanto, tu atención va a perderse cuando seas capturado por tus pensamientos. Cada vez que esto suceda, nota qué te ha distraído, y vuelve a traer tu atención a la respiración nuevamente (pausa 20”) Sin importar qué tanto te vayas, sean cien o mil veces, tu meta es simplemente notar qué te ha distraído y volver a enfocarte en tu respiración… Una y otra y otra vez, te vas a ir en tus pensamientos. Esto es normal, natural y les pasa a todos. Nuestras mentes naturalmente se distraen de lo que estamos haciendo. Cada vez que te des cuenta de que tu atención se ha ido, gentilmente nota que se ha ido, nota qué te ha distraído, y regresa tu atención a la respiración (pausa 20”). Sin importar qué tan a menudo tu atención se vaya, gentilmente reconoce que se ha ido, nota qué te ha distraído y vuelve a enfocarte en la respiración… y cuando estés listo, tráete a la habitación nuevamente y abre tus ojos.

ACT: METAFORA DEL TUNEL








  "Imagina que estas completamente rodeado de montañas. Al otro lado de las montañas está aquello que mas te importa de tu vida. Para llegar a eso tienes que atravesar las montañas, pero no hay manera de poder hacer eso. El único camino que existe es un túnel muy oscuro. En la puerta del túnel hay un cartel que pone “dirección hacia lo que te importa de verdad”. El problema es que en este caso tú le tienes mucho miedo a los túneles, y cuando te acercas a la entrada del mismo tu mente te dice: “Aquí dentro puede haber peligro, no se ve la luz del fondo, no sabes en qué condiciones está el túnel y que peligros acechan en su interior”. Por si fuera poco, tu mente que funciona como una radio siempre encendida que no se apaga de ninguna manera, te sigue contando cosas como: “Tu no eres capaz de atravesar el túnel, eres básicamente miedoso/a y eres un perdedor/a”. Además cuando te acercas al túnel te invade la ansiedad y el desánimo, notas como tu corazón se acelera, sudas, la respiración se entrecorta  y te pones en tensión, experimentando un fuerte impulso a huir y apartarte del túnel.

   El dilema en que te encuentras es el siguiente: Si sigues lo que dice tu mente, tus sentimientos y las sensaciones de tu cuerpo te alejas del túnel y entonces no caminas hacia aquello que merece la pena en tu vida. Si decides a pesar de lo que diga tu mente, tus emociones, tu cuerpo y tus impulsos; entrar al túnel no te queda mas remedio que “estar dispuesto/a” a caminar hacia lo que te importa llevando encima lo que dice tu mente, tus sentimientos, las sensaciones de tu cuerpo y tus impulsos. ¿Qué vas a decidir tú? "

ACT: LA METAFORA DEL AUTOBUS


sábado, 29 de marzo de 2014

INTERVENCION EN TRASTORNO OBSESIVO COMPULSIVO CON ACT



Caso Clínico de intervención con terapias de tercera generación en TOC:

Video:

http://www.canal.uned.es/mmobj/index/id/16086

TERAPIA GRUPAL CON VICTIMAS DE VIOLENCIA DE GENERO. ENFOQUE DE TERCERA GENERACION



Ponente: Vaca, R. El Puerto de Santa María, Cádiz
En el año 2003, el Instituto Andaluz de la Mujer (IAM) en colaboración con los Colegios Oficiales de Psicología de Andalucía Occidental y Oriental, puso en funcionamiento un Programa de Intervención Psicológica Grupal dirigido a mujeres en situación de violencia de género en todo el territorio andaluz. En 2010 se editó por el IAM el Protocolo de Intervención Grupal con las Mujeres Víctimas de Violencia de Género en Andalucía donde se describe dicho programa. Partiendo de unos criterios muy generales, el grupo de profesionales que llevan a cabo la terapia tienen libertad en cuanto al enfoque terapéutico y técnicas a utilizar durante las sesiones. Según se describe en el Protocolo, la atención psicológica grupal se lleva a cabo a través de los Grupos de Reflexión y de los Talleres de Autonomía Personal, teniendo los primeros una duración de tres sesiones de dos horas cada una y una periodicidad semanal y constando los segundos de ocho sesiones de igual duración, siendo por lo tanto un total de once. La intervención que aquí se recoge y que se ajusta a este Protocolo, se enmarca dentro de las terapias de tercera generación, usándose conjuntamente la Terapia de Aceptación y Compromiso (ACT) y Activación Conductual (AC). El trabajo propuesto se plantea de modo flexible para adaptarse a las necesidades concretas del grupo de mujeres, siendo el propósito general de la terapia, cambiar las relaciones entre los eventos privados, las acciones que se emprenden y los valores en los diferentes ámbitos de la vida, ayudando a la mujer a clarificar su rumbo y a retomarlo como una elección personal. Se describirán los contenidos de las sesiones así como los objetivos terapéuticos, entre los que se nombran que la mujer comience a aceptar su historia y las experiencias traumáticas que ha vivido, que aumente su tolerancia ante reacciones emocionales aversivas y en general ante los eventos privados, que se incremente el contacto con fuentes de reforzamiento positivo estables y significativos, que aprenda a valorar el riesgo y a cuestionarse de qué debe necesariamente escapar para protegerse, pero también que sepa elegir cuándo debe responder en otro sentido para poder comprometerse con tareas que le lleven a tener una vida significativa para ella.
Se planteará como una parte central de la intervención y quizás la más difícil, el trabajo con los valores, siendo estos los que van a marcar la dirección en la vida y van a dotarla de sentido.







Video:
http://www.canal.uned.es/mmobj/index/id/16088

LAS MEDIDAS DE AUTOINFORMES COMO MANDOS DISFRAZADOS

 
 
Ponente: López, M. A. CEPSI Psicólogos Bailén, Jaén
Las medidas de autoinforme son utilizadas con frecuencia en la Evaluación Conductual. Éstas son casi siempre entendidas por el clínico como descripciones del estado psicológico del paciente, es decir con una función de Tactos. Sin embargo, no son pocas las ocasiones en las que podrían ser entendidas como mandos disfrazados cuya función sería instar o pedir algo al clínico de manera encubierta.
Además, el carácter eminentemente metafórico del lenguaje, así como la propia naturaleza de los eventos referidos, dificultan la tarea de evaluación. Se analizarán funcionalmente y se expondrán algunos ejemplos clínicos desde la perspectiva de la Psicoterapia Analítica Funcional (FAP) y se verá la equivalencia entre los problemas que ocurren en sesión y los problemas en la vida diaria.

Video:   http://www.canal.uned.es/mmobj/index/id/16079

LA FAP Y LA PSICOTERAPIA INTEGRADA DE PAREJA Y LOS PROBLEMAS DE RELACION

 
 
Ponente: Escuer, E. Centro de Psicología ACTEE (Tarragona)
Este trabajo pretende definir lo que actualmente, en nuestra cultura, se conoce como relación estable de pareja. A partir de ello y de los casos que se han atendido en el centro de psicología clínica del autor de esta comunicación, se van a exponer los aspectos más significativos de la aplicación conjunta de la Psicoterapia Analítico Funcional de Kohlenberg-Tsai (FAP) y la Terapia Integrada de Pareja de Jacobson (TIP).
El punto de partida no es otro que la evaluación del estado de la pareja y sus problemas mediante estrategias de Análisis Funcional de Conducta. En una segunda fase se inicia la intervención utilizando una de las primeras sesiones clínicas para presentar a los clientes los resultados de la evaluación, poner en común de las contingencias encontradas en el análisis funcional y dar pistas a la pareja a fin de que identifiquen las situaciones de su vida cotidiana que, siendo externas a la sesión clínica, aumentan la probabilidad de que la situación conflictiva aparezca.
Lo que tienen en común la FAP y la TIP son la importancia dada al contexto socio-cultural y a la aceptación. La terapia de Jacobson defiende que el terapeuta tiene que lograr de los miembros de la pareja que acepten la función de contexto que cada uno cumple para el otro, y por tanto, que el seno de la pareja es el entramado que da significado a sus conductas. Para conseguir la aceptación, las técnicas aplicadas tienen como objetivo: la transformación de los problemas en vehículos hacia la intimidad, la disminución de los episodios de acusación y el aumento de la expresión de sentimientos positivos y negativos. De Kohlenberg – Tsai se toman los conceptos de reforzamiento natural y de reglas para una actuación clínicamente relevante con la pretensión de que además de ser aplicados en el espacio clínico, la pareja sea capaz de integrarlos en su ambiente cotidiano y por tanto se conviertan ellos mismos y sus conductas en la clave que generalice de manera adaptativa lo tratado en la cínica, consiguiendo que los cambios que puedan darse en la interacción intra-pareja tengan mayor relación con las contingencias que con las conductas adquiridas por reglas.

Video:  http://www.canal.uned.es/mmobj/index/id/16075

EL YO Y LA TOMA DE PERSPECTIVAS: LA TEORIA DEL MARCO RELACIONAL

Ponente: Ferro, R. Centro CEDI, Granada
La formación del Yo ha sido explicada desde la Psicoterapia Analítica Funcional (FAP). Se ha descrito cómo se adquiere el control privado del yo a una edad temprana a través del lenguaje, también se ha analizado los componentes y las fases de este entrenamiento. A lo largo de este proceso, se adquiere la Toma de Perspectiva o la perspectiva del Yo. Por otro lado, un componente esencial en la Terapia de Aceptación y Compromiso (ACT), es el Yo como Contexto o dicho de otro modo, la toma de perspectiva.
Desde la Teoría del Marco Relacional se amplía la teoría expuesta por Kohlenberg y Tsai, y se proponen como variables claves en la formación y en la toma de perspectiva del Yo, los marcos relacionales deícticos. Existen tres marcos relacionales deícticos básicos: Yo-Tú (marcos interpersonales), Aquí-Allí (marcos espaciales) y Ahora-Antes (marcos temporales). Hay dos aspectos fundamentales del Yo que son claves en la intervención psicológica en los problemas de personalidad: la propia perspectiva y el contenido del yo o el yo como contenido. Así desde FAP y ACT se proponen una serie de recomendaciones que son perfectamente compatibles.
En esta ponencia se pretende exponer las relaciones entre ambas teorías y la descripción de estos marcos relacionales y su relación con las patologías del yo y su intervención.

Ponencia:  http://www.canal.uned.es/mmobj/index/id/16078

jueves, 20 de marzo de 2014

LA EVITACION EXPERIENCIAL Y SUS CONSECUENCIAS




LA EVITACIÓN DE EXPERIENCIAS DOLOROSAS O TEMIDAS: CONSECUENCIAS


La evitación experiencial consiste en tratar de evitar tus propias experiencias internas (pensamientos, sentimientos, recuerdos, sensaciones corporales…) incluso aunque el hecho de hacerlo te acabe causando problemas.


Se trata de experiencias que, en principio, resultan dolorosas o perturbadoras, pero cuya evitación, aunque te aporte alivio a corto plazo, te acaba perjudicando a largo plazo. Por ejemplo, la persona que evita ir a una fiesta a la que desearía ir, debido al malestar que le produce su ansiedad social; o bien, la persona que evita hacer ejercicio porque le resulta pesado y frustrante. En realidad, lo que está evitando no es hacer ejercicio, sino el sentimiento de frustración que eso le produce. Y la persona con ansiedad social que no acude a esa fiesta no lo hace para evitar la fiesta en sí misma, sino que es la experiencia de sentir ansiedad la que desea evitar.


La evitación experiencial se produce cuando las personas se plantean como objetivo sentirse bien y evitar todo malestar. El problema es que las reglas que usamos para el mundo exterior no funcionan en nuestro mundo interior. En el mundo exterior, querer librarnos de aquello que nos molesta parece una buena idea y a menudo funciona. Por ejemplo, si tienes la ropa manchada te la quitas y te pones otra limpia. Pero en el interior de tu mente las cosas funciona al revés, rigiéndose por una norma parecida a esta: si no estás dispuesto a tener algo, entonces lo vas a tener. Es decir, si no estás dispuesto a sentir ansiedad, entonces la vas a sentir, y además con más intensidad. Si no estás dispuesto a sentir frustración, entonces te vas a sentir aún más frustrado. Y lo mismo podemos decir del resto de experiencias internas negativas. Esto es así porque, por el modo como funciona la mente humana, cada vez que intentas evitar, eliminar o suprimir una experiencia interna, el mismo intento de librarte de ella hace que dicha experiencia crezca, aumentando en intensidad y frecuencia.


Esto hace que, con el tiempo, la vida de una persona se vaya "encogiendo" cada vez más, ya que las situaciones que se evitan son cada vez numerosas, y los pensamientos, recuerdos o emociones que tratan de evitarse se hacen cada vez más abrumadores e insoportables. Es decir, cuanto más luchas contra ellos, más crecen. Con el tiempo, la capacidad para estar en el momento presente y disfrutar la vida se va desvaneciendo, porque tu vida se centra en evitar lo malo, en vez de salir en busca de lo bueno.


La mayoría de las personas no logran superar sus problemas emocionales porque las estrategias que están utilizando para intentar hacerlo consisten en modos de tratar de evitar sus experiencias. Es decir, buscan desesperadamente la manera de tratar de evitar sentir lo que sienten y de evitar pensar lo que piensan o recordar lo que recuerdan.


Si suena el despertador por la mañana y tu mente se llena de pensamientos y emociones desagradables sobre el horrible día que te espera, las pocas ganas que tienes, o lo desgraciada que es tu vida y no estás dispuesto a experimentar y sentir esas emociones y pensamientos, entonces te deprimirás aún más, no te levantarás de la cama y nada cambiará.



domingo, 2 de marzo de 2014

SI FREUD LEVANTARA LA CABEZA:: UNA RECONCEPTUALIZACION DESDE LA FAP



http://www.canal.uned.es/mmobj/index/id/16085

Ponente: Martín, F. Almería
Cogiendo como hilo conductor la idea transmitida en el primer congreso de SAVECC acerca de que si Freud redivivo estuviera entre la comunidad clínica sería un terapeuta FAP, se argumenta que ciertos aspectos de la técnica, de la teoría y de la situación psicoanalítica clásica obtienen desde FAP una clara comprensión a través de las herramientas conceptuales y prácticas provenientes del Análisis Funcional de la Conducta Clínica. No se trata de destacar las semejanzas entre ambas formas de tratar los problemas psicológicos, sino de la posibilidad de re-escribir el psicoanálisis a la luz de la Psicoterapia Analítico Funcional. Los componentes básicos de ambas terapias serían la producción de material (esencialmente conducta verbal, pero por supuesto otro tipo de comportamientos interpersonales), el análisis (esencialmente interpretativo) y la relación terapéutica (alianza y afectos). El concepto central de resistencia sería toda suerte de comportamientos generalmente destinados a la evitación experiencial (negación, racionalización, rumiación, proyección e introyección) y serían conceptualizadas como conductas clínicamente relevantes tipo I en FAP. La intervención en ella podría ser la aclaración e interpretación (una explicación funcional de la conducta evitativa en términos biográficos) y precisamente podría adquirir el paciente una adecuada manera de entender su conducta (CCR3). La transferencia, concepto central en el psicoanálisis, sería la actualización in vivo de emociones, sentimientos, deseos y conductas hacia el terapeuta (en gran medida CCR I) y que es necesario generar en la sesión (tanto con posturas abstinentes “psicoanalíticas” como pro-activas como confrontación o seducción, dado que siempre se está haciendo algo). En definitiva, la transferencia es traer el repertorio conflictivo pasado a la situación presente. Respecto a la relación terapéutica, probablemente tendría sentido en la Viena de fin de siglo esconderse tras el diván. No formaba parte de las prácticas sociales la apertura del mundo privado. Esta represión es sustancialmente menor hoy, por ello Freud haría de espejo cara a cara. De hecho, ambas terapias requieren crear afecto para que haya efecto (en ello consiste la utilización contra-transferencial). En definitiva, hacer consciente lo inconsciente no deja de ser común en ambos formatos.

LIMITACIONES DE LAS TERAPIAS COGNITIVAS





REVISION DE LA EFICACIA DE LOS METODOS DE REESTRUCTURACION COGNITIVA  DE ELLIS Y BECK

.Fuente original-- Garry Martin y Joseph Pear: Modificación de conducta. Que es y cómo aplicarla. Pearson Educación. Madrid, 2008

Texto del libro referido:

TREC DE ELLIS

“Gossette y O’Brien (1989, 1992) examinaron 107 estudios sobre terapia racional emotiva que: (1) se centraban en los intentos de los terapeutas para modificar las creencias irracionales de los clientes y (2) no estaban acompañados de otras estrategias comportamentales (tales como el ensayo conductual y la práctica reforzada). Revisaron todos los informes conocidos (tanto estudios publicados como escritos no publicados) en que la terapia racional emotiva se comparaba con otros tipos de terapia o con estudios en que no se procuró ningún tratamiento. El enfoque de Ellis era más efectivo que varias de las condiciones comparadas en reducir las auto-afirmaciones irracionales de los clientes tan sólo en el 46% de los casos, y era más efectivo que otras condiciones en reducir el malestar emocional sólo en el 26% de los casos. Finalmente, esta terapia no tuvo prácticamente ningún efecto en otras medidas conductuales, tales como el grado en que los clientes realmente se acercaban a los objetos   temidos. Los resultados de la revisión de Gossette y O’Brien sugieren que una gran parte del éxito de la terapia comportamental racional emotiva se debe a las tareas para hacer en casa en lugar de al cuestionamiento de las creencias irracionales.”.

TERAPIA COGNITVA DE BECK:

“Aceptando que puede ser efectiva, la pregunta que surge es: ¿cuáles son entonces sus ingredientes y/o componentes activos? Un análisis de componentes  de la terapia de Beck para abordar la depresión comparó tres intervenciones: la sola asignación de las tareas conductuales; estas mismas tareas más la aplicación de reestructuración cognitiva; y estos dos componentes más la identificación y modificación de creencias centrales generalizadas, consideradas causantes principales del pensamiento disfuncional y de las reacciones depresivas. Las tareas conductuales se centraban básicamente sobre la identificación de problemas cotidianos específicos y la prescripción de un conjunto de actividades semi-estructructuradas que ayudaban a los participantes a entrar en contacto con los reforzadores naturales del entorno. Los resultados indicaron que, al final del tratamiento y tras un seguimiento de dos años, las tres condiciones experimentales eran prácticamente idénticas en todas las medidas (Jacobson y cols., 1996; Gortner, Golan, Dobson & Jacobson, 1998). Estos hallazgos sugieren que la reestructuración cognitiva puede no ser un componente necesario en el tratamiento de la depresión. En un proyecto que replicó y amplió estos hallazgos, los investigadores compararon las tareas de activación conductual para hacer en casa con la terapia cognitiva (incluida la reestructuración cognitiva),  con la medicación antidepresiva y con un grupo de control placebo (Dimidjian y cols., 2003;  y discutido en Martell, Addis & Dimidjian, 2004). El grupo de activación conductual rindió al mismo nivel que el grupo medicado con antidepresivos en algunas medidas y mejor que él en otras. Tanto la activación conductual como el grupo de antidepresivos superaron significativamente al grupo de terapia cognitiva, que no era significativamente diferente del grupo placebo de control. Estos resultados cuestionan seriamente la necesidad de añadir la reestructuración cognitiva a la activación conductual en los tratamientos de depresión.
En la misma línea, Andrew Sweet y su equipo examinaron veintinueve estudios que comparaban abordajes puramente conductuales con esos mismos tratamientos a los que se añadían componentes cognitivos para superar una serie de trastornos (no sólo depresión). Llegaron a la conclusión de que el 83% de los estudios mostraba
que no se conseguían mejores resultados añadiendo componentes terapéuticos específicos de la reestructuración cognitiva (Latimer & Sweet, 1984; Sweet & Loizeaux, 1991). Por ello, aunque la adición de técnicas de reestructuración cognitiva a las intervenciones conductuales puede mejorar los resultados con algunos individuos que padecen trastornos, un gran número de estudios sugiere que no siempre es así.”



NUEVO LIBRO DE HAYES Y ACT EN ESPAÑOL






Nuevo libro de Hayes y cols. sobre ACT en español: 
TERAPIA DE ACEPTACIÓN Y COMPROMISO
Proceso y práctica del cambio consciente (mindfulness)
BIBLIOTECA DE PSICOLOGÍA
DESCLÉE DE BROUWERS. 2014

La Terapia de Aceptación y Compromiso (ACT) pertenece a lo que ha dado en llamarse terapias de tercera generación que suponen una revisión de los planteamientos cognitivo-conductuales vigentes hasta no hace muchos años. La ACT asienta sus fundamentos teóricos en el contextualismo funcional y en la teoría del marco relacional, lo que implica un cambio radical en la consideración de los elementos del comportamiento humano, que ya no son analizados en su particular individualidad sino en cuanto elementos que forman parte del contexto en el que tiene lugar la propia conducta.

En el ámbito de la práctica terapéutica, su aportación fundamental es la despatologización de la experiencia humana. Vivir no es una enfermedad, por dura que sea la realidad; lo verdaderamente patológico consiste en renunciar a las propias vivencias y experiencias vitales, la evitación vivencial. De este modo, la ACT se convierte en una invitación a la vida, a la realización personal a través de la propia trayectoria vital.

Su objetivo terapéutico es el desarrollo de la flexibilidad psicológica a la que están enfocadas las distintas técnicas y herramientas recogidas en este manual. Los seguidores de distintos enfoques terapéuticos -Terapia Narrativa, Terapia Gestalt, Psicoterapia Analítica Funcional, PNL, Focusing, Mindfulness, Logoterapia, etc.- encontrarán en esta obra muchas técnicas y conceptos que les resultarán familiares. La ACT, sin embargo, es un enfoque diferente que puede enriquecer la práctica terapéutica de los profesionales de tendencias muy diversas.

En el plano operativo, el presente manual aporta gran cantidad de materiales diagnósticos y de seguimiento de aplicabilidad inmediata y aborda, además, la situación vivencial del propio terapeuta en el transcurso de la terapia, sus dudas y temores. Proporciona una visión clara de la relación terapéutica mediante abundantes transcripciones de sesiones y aporta ejemplos concretos de motivación terapéutica mediante metáforas y demás técnicas propias de la ACT.